El gobierno está en deuda con el pueblo en el problema de la inseguridad...
Hace una semana la entrevistó la
televisión, ayer la prensa limeña. Sus palabras condensan el sentir mayoritario
de la ciudadanía. Es Natalia Málaga. El personaje del año 2013.
La importancia de sus declaraciones
es que son sinceras. No ocultan nada. Y lo que es mejor. Piensa como la gente
común y corriente.
Por ejemplo. En torno al problema de
la violencia que agobia al país entero señala:
“El presidente que empiece a
resolver la inseguridad, se meterá al pueblo en el bolsillo…”
Y añade: “Si un político enfrenta la
inseguridad, triunfará y vivirá en el corazón de todos…”
Exactamente lo que opina y pide la
colectividad. Es como si Natalia le recordara al primer mandatario que solo
depende de él para actuar contra la violencia.
Mientras no se decida, estará
perdiendo la gran oportunidad de consagrarse como el presidente que perennizó
su nombre e hizo historia.
En otro momento de la entrevista aconseja
al gobernante del país a imponer autoridad,
Sobre el particular sostiene: “Ni hay otra forma. Si no hay autoridad, nada funciona…”
“Si no hay disciplina no hay
justicia. No hay nada. En el Perú falta autoridad y lo ves a diario…”
Acerca de los actuales políticos
expresa: “Yo metería en el mismo cuarto a Humala, Alan, Keiko, Toledo, Eliane,
Nadine. A todos….”
“Les quitaría sus celulares y les
diría: Se acabó: Aquí todos concentrados al cien por ciento en el país…”
“A romperse el alma por el Perú, a
exigir, a sacar la cara, a sobreponerse. Nada de pelear…”
Y al decirle que es una mujer súper
deseada por los políticos y que todos la quieren tener en sus filas, sin
inmutarse, responde:
“No. No me gusta…”
Enseguida dirige una sana sugerencia
y hace una sabia reflexión sobre la política y quienes se dedican a ella.
“Cuando entras a la política quemas
tu imagen. Yo tengo una familia. Tengo una hija. Tengo una imagen…”
Más claro. Imposible…
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