Una de las grandes avenidas de Tokio, donde se devuelve todo lo que una persona pierde...
¿Qué haría usted si en un
restaurante encuentra una tarjeta de crédito o un celular que alguien olvidó…?
¿Los entrega al administrador, la
policía o los guarda para usarlos…?
¿Y si halla un maletín con medio
millón de soles…? ¿Lo devuelve o no…? La respuesta es personal y corresponde a
cada uno de nosotros.
Al respecto, es bueno saber que si
usted estuviera en Japón y se le pierde cualquier cosa, incluyendo dinero,
seguro que lo recuperará.
Sobre las tarjetas de crédito solo
en Tokio, la capital, el año pasado la gente devolvió trescientas cuarenta mil
que fueron perdidas por sus dueños. Casi la misma cantidad ocurrió con los
celulares
Y lo del maletín. Aunque usted no lo
crea, un ciudadano tokiota lo entregó conteniendo en su interior dieciocho mil
cuatrocientos millones de yenes, es decir 154,000 dólares.
Según fuentes oficiales, en el 2014
los japoneses devolvieron 3,300 millones de yenes, cerca de noventa millones de
soles, que sus propietarios perdieron u olvidaron en algún lugar.
La cifra solo está referida a
dinero. No registra los objetos que si fueran incluidos el monto sería mucho
más elevado.
Algo más. Los japoneses son tan
honrados que la cantidad de dinero perdido que la gente devuelve ha ascendido
de manera constante en los últimos cinco años.
Del total de dinero extraviado que
los ciudadanos honestos llevaron a los puestos policiales, 2,400 millones de
yenes o veinte millones de dólares fueron regresados a sus dueños.
Según las normas vigentes, en el
País del Sol Naciente la policía retiene
por un máximo de tres o seis meses una propiedad perdida.
Si durante ese tiempo nadie la
reclama, la persona que la encontró está facultada para solicitarla.
En cambio, cuando el dueño aparece,
quien la encontró puede recibir una recompensa de cinco a veinte por ciento.
Un total de 390 millones de yenes o
3,200 millones de dólares perdidos cuyos dueños no pudieron ser
encontrados, pasaron a las arcas del municipio de Tokio.
Esto obedeció a que las personas que
los hallaron renunciaron al derecho de quedarse con el dinero. Increíble.
¿Verdad…?
Devolver lo que se encuentra es tan
común en Japón que, aparte de la policía, en todo lugar público o privado
existen oficinas para su recepción.
¿Cuál es la razón de este admirable
comportamiento considerado como un hábito nacional por los japoneses…?
Analistas sostienen que se sustenta
en la frase: “Si no es tuyo, es de alguien” que aprenden los niños en el hogar desde los
primeros años.
Esa virtuosa expresión queda grabada
en su mente para toda la vida y es la base del envidiable sentimiento de honestidad
y seguridad que existe en el país…
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