Cinco perros en menos de dos metros cuadrados. Escena captada en una urbanización de Trujillo...
El perro es el mejor amigo del
hombre. Es una gran verdad. Hay muchas frases bonitas al respecto.
Que las mascotas llenan una parte de
nuestras vidas. También es cierto.
Sin embargo, en Trujillo son
contados los canes que reciben el cuidado, atención y cariño que se merecen.
Por lo general, las personas se
entusiasman cuando los ven pequeños, porque a esa edad todos los seres
vivientes son encantadores y nos enternecen.
Fatalmente, una vez que la inicial
ilusión se aleja, viene el desencanto. Y de qué manera. El abandono es
inminente.
Basta saber que en la ciudad existen
miles de perros callejeros que deambulan por doquier en busca de alimento y
abrigo.
Son aquellos que, en su desesperación,
rompen las bolsas de basura extraídas de los hogares fuera del horario fijado.
Los que ladran sin cesar perturbando
la tranquilidad pública y, en ocasiones, atacan a la gente y nadie se
responsabiliza de sus actos.
Igualmente, es común que la gran
mayoría de propietarios saquen sus mascotas “a pasear” y en su recorrido hagan
sus necesidades en el jardín del vecino o en el parque más cercano.
En conclusión no existe en el medio,
como sucede en otros lugares, una cultura para la crianza de perros.
Por eso, felicitamos la ordenanza de la gerencia de
Salud de la Municipalidad Provincial que regula esa actividad.
La norma edilicia obliga a los
dueños a portar una licencia que les permita caminar por las calles con su
mascota luciendo un collar y una medalla
de identificación.
Condición esencial para la crianza
de canes es recibir charlas educativas al respecto, incluso orientadas a recoger
sus heces.
El propósito es reducir el riesgo
que otras personas contraigan enfermedades a causa de los gusanos y parásitos
como pulgas y garrapatas, aparte de la rabia.
Está comprobado que los perros
pueden trasmitir el parásito toxocara
que produce patologías viscerales, oculares y cerebrales en el ser
humano.
Es importante partir de la premisa
que criar una mascota constituye un compromiso y una responsabilidad. Exige
dedicación y tiempo.
Esperamos que los propietarios de
perros respondan al llamado del municipio y contribuyan a mejorar la imagen de
la ciudad orientándonos a vivir en un
ambiente de respecto, armonía y orden…
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