Cassius Clay acaba de ser considerado como el mejor deportista de todos los tiempos...
El importante diario alemán Bild acaba de realizar una encuesta entre periodistas especializados de ese país en torno al mejor deportista de todos los tiempos.
La pregunta fue planteada a cincuenta y tres reporteros deportivos comprendidos entre los veinticinco y setenta y tres años de edad.
El test no sólo se remitió a la trayectoria profesional de los seleccionados, sino especialmente a sus triunfos y al aura que proyectaban.
Cassius Clay, el boxeador norteamericano que cambió de nombre por el de Muhammad Alí al profesar la religión islámica, se llevó las palmas por amplio margen.
Dentro de esa disciplina deportiva, el fornido moreno es considerado, desde hace un tiempo, como el más grande de la historia en la categoría de pesos pesados.
Tuvo gran vigencia durante las décadas del sesenta y setenta. Se caracterizó por su estilo poco ortodoxo a base de constantes saltitos y pleno movimiento en el ring.
Así mismo, por la forma de actuar sicológicamente sobre los rivales durante la pelea y sus resultados espectaculares.
Al término de su carrera registró sesentiún combates. Obtuvo cincuenta y seis victorias, treinta y siete por KO y cinco derrotas.
Los lugares siguientes fueron obtenidos por Pelé (fútbol), Michael Schumacher (piloto de Fórmula Uno) y Michael Jordán (básquetbol).
Siguen Franz Beckenbauer (fútbol), Jesse Owens (atletismo), Diego Maradona (fútbol), Carl Lewis (atletismo) y Michael Phelps (natación).
Los especialistas estiman el resultado de la encuesta como acertado.
Cassius Clay constituye la leyenda viviente del box por sus extraordinarios deseos de triunfar y especial carisma.
El original desplazamiento en el entarimado y la contundencia impredecible de sus golpes serán recordados por siempre.
Clay es un ejemplo para las nuevas generaciones de deportistas del mundo entero…
La pregunta fue planteada a cincuenta y tres reporteros deportivos comprendidos entre los veinticinco y setenta y tres años de edad.
El test no sólo se remitió a la trayectoria profesional de los seleccionados, sino especialmente a sus triunfos y al aura que proyectaban.
Cassius Clay, el boxeador norteamericano que cambió de nombre por el de Muhammad Alí al profesar la religión islámica, se llevó las palmas por amplio margen.
Dentro de esa disciplina deportiva, el fornido moreno es considerado, desde hace un tiempo, como el más grande de la historia en la categoría de pesos pesados.
Tuvo gran vigencia durante las décadas del sesenta y setenta. Se caracterizó por su estilo poco ortodoxo a base de constantes saltitos y pleno movimiento en el ring.
Así mismo, por la forma de actuar sicológicamente sobre los rivales durante la pelea y sus resultados espectaculares.
Al término de su carrera registró sesentiún combates. Obtuvo cincuenta y seis victorias, treinta y siete por KO y cinco derrotas.
Los lugares siguientes fueron obtenidos por Pelé (fútbol), Michael Schumacher (piloto de Fórmula Uno) y Michael Jordán (básquetbol).
Siguen Franz Beckenbauer (fútbol), Jesse Owens (atletismo), Diego Maradona (fútbol), Carl Lewis (atletismo) y Michael Phelps (natación).
Los especialistas estiman el resultado de la encuesta como acertado.
Cassius Clay constituye la leyenda viviente del box por sus extraordinarios deseos de triunfar y especial carisma.
El original desplazamiento en el entarimado y la contundencia impredecible de sus golpes serán recordados por siempre.
Clay es un ejemplo para las nuevas generaciones de deportistas del mundo entero…
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