El muro virtual en lugar del semáforo, sería la solución a infinidad de problemas de tránsito...
Mientras en nuestra ciudad discutimos porque no encienden los tres colores de los semáforos y denunciamos a los conductores por no obedecer las señales de tránsito, en el mundo se buscan nuevos sistemas para garantizar la seguridad de los peatones.
El estudio más reciente es el Virtual Wall, muro virtual en español, que ubica dos postes a un extremo y otro de la calzada que separa los vehículos de los peatones.
Se trata de una pared transparente infranqueable, de dos pantallas, generada por un ordenador.
Los pilotos son advertidos desde una distancia prudencial para que reduzcan la velocidad y se detengan.
De inmediato se enciende una barrera de luz roja delante de los coches que facilita el libre tránsito de las personas que deciden cruzar..
La imagen luminosa sólo desaparece cuando el último viandante se encuentra en la vereda contraria.
Recién, entonces, los automotores pueden reanudar su recorrido.
El diseño, propio de la ingeniería en la red, pertenece al investigador asiático Hangyong Lee y según la opinión de los entendidos, es aún una quimera.
Sin embargo, es un importante adelanto del esfuerzo desarrollado en otros países para regular en forma definitiva el tránsito vehicular y peatonal.
El Virtual Wall está ideado justamente pensando en preservar la vida humana tan maltratada por los conductores de unidades móviles, sobre todo en nuestro medio...
Mientras en nuestra ciudad discutimos porque no encienden los tres colores de los semáforos y denunciamos a los conductores por no obedecer las señales de tránsito, en el mundo se buscan nuevos sistemas para garantizar la seguridad de los peatones.
El estudio más reciente es el Virtual Wall, muro virtual en español, que ubica dos postes a un extremo y otro de la calzada que separa los vehículos de los peatones.
Se trata de una pared transparente infranqueable, de dos pantallas, generada por un ordenador.
Los pilotos son advertidos desde una distancia prudencial para que reduzcan la velocidad y se detengan.
De inmediato se enciende una barrera de luz roja delante de los coches que facilita el libre tránsito de las personas que deciden cruzar..
La imagen luminosa sólo desaparece cuando el último viandante se encuentra en la vereda contraria.
Recién, entonces, los automotores pueden reanudar su recorrido.
El diseño, propio de la ingeniería en la red, pertenece al investigador asiático Hangyong Lee y según la opinión de los entendidos, es aún una quimera.
Sin embargo, es un importante adelanto del esfuerzo desarrollado en otros países para regular en forma definitiva el tránsito vehicular y peatonal.
El Virtual Wall está ideado justamente pensando en preservar la vida humana tan maltratada por los conductores de unidades móviles, sobre todo en nuestro medio...
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