miércoles, 29 de julio de 2009

TURISMO: ¡PERO SIN DELINCUENCIA…!


La experiencia de un crucero en el río Amazonas es indescriptible. Sin embargo, el estado debe garantizar la seguridad de los turistas...

Aparte del complejo arqueológico constituido por la ciudadela Machu Picchu, el Perú cuenta con numerosos atractivos turísticos, además de su exquisita gastronomía.

Uno de los recursos de mayor renombre es el río Amazonas, considerado entre los catorce favoritos para integrar la lista final en la última clasificación de las Nuevas Maravillas Naturales del Mundo.

Con frecuencia se programan viajes sobre sus aguas, que surcan siete países latinoamericanos, complementadas con eventuales visitas a pueblos nativos ribereños.

En los días previos a las fiestas patrias, la empresa Aqua Expeditions organizó un crucero que debía cumplir una novedosa travesía para un equipo especial de invitados.

Figuraban entre otros personajes del extranjero, un experto en comida nacional y un renombrado fotógrafo. Ambos peruanos.

Fatalmente, la última noche del recorrido, la embarcación fue abordada por un grupo de sujetos armados que despojaron a los turistas de sus pertenencias.

Los pasajeros trataron de minimizar el inesperado suceso, sin embargo, el caso debe ser motivo de un minucioso análisis de parte de las autoridades.

Lo ocurrido en el Amazonas es sólo una manifestación de los continuos problemas delincuenciales que se experimentan en el resto el país.

Llama poderosamente la atención que, a pesar del alarmante ascenso del porcentaje de robos al paso y en los domicilios, el gobierno no adopte ninguna medida para endurecer las leyes.

Está comprobado que ante una legislación benigna, los delincuentes se ven estimulados a seguir cometiendo sus fechorías, incluso portando armas que en ocasiones utilizan para matar.

Existen numerosos casos de individuos ranqueados que han salido del penal y vuelven a reincidir en el delito, lo que exige urgentes reformas en la legislación.

Lo más penoso resulta cuando los malhechores atentan contra inocentes ciudadanos que vienen de otros países con el ánimo de conocer el patrimonio nacional.

Si deseamos que su presencia en el territorio sea placentera, es indispensable otorgarles la protección necesaria, al margen de combatir con la dureza requerida el delito.

El turismo es una valiosa fuente de ingresos en todas las naciones, mucho más en el Perú, donde existen tantas riquezas dignas de admiración que concitan la atención mundial.

Nuestra misión es contribuir a que el Perú sea retirado de la temible nómina de países en riesgo, que impide a muchos extranjeros llegar a nuestra tierra.

Esperamos que la desagradable experiencia de los visitantes del Amazonas, despierte el sentimiento dormido del Ejecutivo y el Congreso para adoptar las acciones correctivas necesarias.

Combatir la delincuencia y preservar la seguridad ciudadana es obligación fundamental del estado…

No hay comentarios: