Casi sin ángulo, Cedrón convierte el de honor...
Tiros afuera. Atrapados por el
arquero y hasta despejados en la puerta del arco, fue la característica del
duelo que perdió ayer la Universidad César Vallejo ante el Aurich de visita.
Fatalmente, en el fútbol se gana por
anotaciones y no por aproximaciones. Y ahí radica la razón del fracaso.
El cuadro de Navarro empezó bien. De
arranque tuvo hasta dos ocasiones inminentes de gol, pero faltó resolución.
Esa idea sorpresiva y absurda que
genera la falsa apreciación que todo va a resultar fácil o que ya vendrán otras
oportunidades.
Un gran error. Porque en la primera
combinación al área de Libman, Tejada lo venció tras preciso pase de Pacheco.
Ahí se quebraron los iníciales
arrestos del conjunto y se desequilibró el esquema de la visita. El golpe
anímico fue duro.
Mientras, los norteños aprovecharon
el desorden para convertir el segundo que ponía las cosas cuesta arriba.
En esos momentos difíciles, vienen a
la mente los sucesivos triunfos en los
últimos torneos sobre el “Ciclón” y se tiene que levantar el espíritu.
Cedrón, que había estado escondido,
recibe un servicio adelantado de Cruzado. Supera de cabeza a Gallese y se la
clava de zurda, casi sin ángulo. Golazo.
Comienza el complemento con el ánimo
recuperado en la UCV que vuelve al ataque y repite los disparos sin dirección.
Se producen jugadas de ida y vuelta
que dan emoción al poco público que estuvo en las tribunas y nada más.
Como novedad, Franco ejecuta el
relevo de Montes por Cobelli que, en su primera acción, no realiza el esperado
centro desde la izquierda. Habrá que esperar.
Sobre el cierre, Salomón salva el
tercero al neutralizar un zapatazo a boca de jarro y suena el pitazo final.
A mitad de semana viene la
Universidad San Martín que les ganó en el Miguel Grau del Callao y deben
cobrarse la revancha. No cabe otra.
Ahora hay que meterla. Porque ayer
estuvieron de espaldas al gol…
No hay comentarios:
Publicar un comentario