Turistas recién llegados a Salaverry en un crucero observan a unos niños que bailan marinera...
Los tan esperados trabajos de
dragado del puerto marítimo de Salaverry, se inician en estos días, según
información de ENAPU.
La tarea estará a cargo de las
dragas Francesco Di Giorgio y Filippo Brunelleschi, pertenecientes a la empresa
Codralux, del grupo belga Jan De Nul.
El objetivo es extraer más de un
millón de toneladas métricas de arena para facilitar el embarque y desembarque de
buques de gran calado.
Según el contrato, las operaciones
se efectuarán en el canal de acceso, la zona de maniobras y el costado del
muelle en cuatro meses.
Al concluir, el puerto volverá a
convertirse en la puerta de ingreso y salida de productos agrícolas,
manufacturados y mercaderías, entre otros.
Hay que recordar que su nombre
figura dentro de la ruta obligada en los más importantes cruceros turísticos
del mundo.
Basta mencionar que, a nivel
internacional, es considerado como uno de los puertos comerciales más activos
del país.
De otro lado Salaverry, identificado
desde altamar por el cerro Carretas, es el puerto emblemático del norte y la
región La Libertad.
Tiene una ubicación geográfica
estratégica. Dista catorce kilómetros de Trujillo y ocho de la carretera
Panamericana.
Es indudable que con las obras de
dragado, recuperará la prestancia que tuvo a través de su historia.
Sin embargo, es oportuno reconocer
que esto se logró debido a la insistencia de los dirigentes portuarios,
operarios y la misma población porteña.
Entre ellos figura el sindicalista
José Cabrera Casanova, quien durante años se dedicó a tocar puertas para dar a
conocer el problema y la necesidad de darle solución.
Como muestra de humildad, no se
cansa de expresar su gratitud al gobierno Regional, los congresistas, ENAPU y al
mismo gobierno central.
Extiende su agradecimiento a los diferentes
medios de comunicación que lo acogieron para hacer escuchar la voz del puerto.
La última vez que lo vimos
anunciando el arribo de las dragas notamos en su rostro la satisfacción que
proporcional la meta cumplida.
Ahora la misión de las embarcaciones es
excavar la arena, habilitar el puerto y no exhibirse, o de visita, como ocurrió alguna vez.
Llegan para trabajar de verdad y
devolverle a Salaverry la importancia que siempre tuvo.
Para cumplir su acostumbrada labor
portuaria y esperar con los brazos abiertos a las oleadas de turistas que desean
conocer el norte del Perú, Trujillo y el calor de su gente…
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