Colorida escena de la ceremonia de inauguración de los XVII Juegos Bolivarianos en Trujillo, Perú...
Se abrió el telón de los XVII Juegos
Bolivarianos que tiene como sede principal la ciudad de Trujillo.
La ceremonia inaugural, que resultó
todo un éxito, se efectuó la noche del sábado en el estadio Chan Chan de la
Ciudadela Deportiva Mochica-Chimú.
Sin embargo, se registraron algunos
hechos que la mayoría de los asistentes no vio. Entonces, aprovechamos para contárselos.
º Las delegaciones asistentes están
conformadas en su mayoría por jóvenes deportistas de uno y otro sexo que
desfilaron sonrientes y relajados. Pero, con la inequívoca ilusión de llevarse
una presea.
ª A propósito de los participantes.
En el momento de desfilar, mientras la televisión los enfocaba, varios de ellos
captaban escenas del estadio y las tribunas empleando sus celulares, cámaras
digitales y tabletas para llevarse las imágenes como recuerdo a sus países de
origen.
ª Cada vez que pasaba una comitiva
frente a la tribuna oficial, las autoridades se ponían de pie y su primera reacción
era abotonarse el saco antes de aplaudir. El presidente Ollanta Humala, quien
esta vez vino solo, ganó a todos. Brindó los aplausos más prolongados.
ª En una incorrecta forma de emplear
el idioma, el maestro de ceremonias llegó a expresar: “hermanos y hermanas”,
“bienvenidos y bienvenidas”. No era necesario. Solo debió decir: hermanos y
bienvenidos.
ª Quienes estuvieron acertados a sus
intervenciones fueron las autoridades. Todos los discursos fueron cortos y
precisos. Sin palabras de más. Tal como se estila en el mundo actual.
ª El alcalde de la ciudad, César Acuña Peralta, fue sincero y agradecido
al reconocer la financiación del estado en la construcción de la
infraestructura deportiva que, al final, quedará para la colectividad
trujillana. Recibió aplausos.
ª Impresionante el sistema de
iluminación del escenario deportivo construido en el terreno del ex complejo
Chicago. De lejos, es mucho mejor que la
del estadio Mansiche antes de cerrarse para reemplazar el gras artificial por
el natural.
ª A pesar de la magnificencia del
acto, el público asistente aplaudió muy poco. Por momentos, se le notó apático.
Da la impresión que se reprime. Tal vez, por vergüenza. Un error. Si vio algo
gratificante, aplauda no más. A rabiar. No se contenga.
ª Espectacular la representación mochica-chimú
que inició el programa. Agradó a todos. Fue para que, quienes nos visitan,
conozcan parte de nuestros ancestros e historia.
ª Y qué decir de las danzas y bailes
tradicionales del Perú con sus coloridos atuendos típicos y los fuegos
artificiales que cerraron la fiesta. Nos hizo gozar a todos.
ª Felicitaciones al comité
organizador de los juegos. Debemos aceptar que salió tal como se esperaba. No
se dejó nada al azar. Que el resto del certamen sea igual…
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