¡VALLEJO APRENDIÓ A GOLEAR…!

 Pando ya disparó de zurda, Ferreyra no logra detener y la bola está a punto de cruzar la línea de gol. Era el segundo...

Nos escucharon los muchachos. Hace una semana el reclamo era que la Universidad César Vallejo no metía más de dos goles por partido.

             

La comparábamos, con cierta envidia, con la efectividad del Juan Aurich de Chiclayo que no bajaba de los tres por match.

             

Bueno. El sábado anterior, dio en la yema del gusto a sus seguidores. Goleó por tres a cero a la Universidad Técnica de Cajamarca.

             

Fue una victoria clara. Contundente. Que no deja dudas sobre la superioridad del cuadro trujillano.

            

Hay que reconocer que la UCV empezó mostrando temores. Lo que, en lo posible, debe evitarse. Eso invitó a la visita asediar el arco local.

             

Sin embargo, al promediar la media hora los jugadores se dieron cuenta que, estando en casa, lo aconsejable era ir para adelante.

             

Aprovecharon que los de la Ciudad del Cumbe no lograban hilvanar acciones entre el medio campo y su línea de avanzada.

            

Así llegó el primero. Producto de una bola parada que vino del córner. Pelotera en el área. Mal rechazo y gol de Ciucci que subió para apoyar.

             

Antes de los veinte del complemento, Navarro efectuó un cambio que le dio resultado en Huancayo. Chávez por Tejada. Y no se equivocó.

             

Rápidas combinaciones nacen en la ofensiva. En una de esas, Pando queda habilitado luego de un rebote que descontrola a su marcador y… gol.

             

Sobre el pitazo que cerraba el telón, Chávez supera a Ferreyra y anota el tercero. Lapidario para el representativo andino.

             

Este encuentro estableció varias marcas dignas de resaltar.

             

Los “poetas” despintaron al UTC y le quitaron el invicto. Es la primera vez que la UCV, que mereció aplausos, convierte tres goles en el torneo.

             

A pesar de ser muy disputado, resultó un cotejo limpio. El juez no sacó una sola tarjeta amarilla.

             

Las tribunas lucieron vistosas. Hubo una sana competencia de barras con tambores y cornetas. Se notó mucha gente de Cajamarca.

            

Con todos estos antecedentes, queda la mesa servida para esperar a Universitario. Pero, cuidado. Porque Vallejo, ya aprendió a golear…