Las familias numerosas en el Perú sufren para satisfacer sus necesidades básicas...
Una
visión aproximada sobre la realidad del planeta es determinada por estudios e investigaciones efectuados por
diversos organismos internacionales.
Como
ocurre con el Informe Mundial sobre la Felicidad 2015 que acaba de dar a
conocer la Red de Soluciones para el Desarrollo Sostenible de las Naciones
Unidas.
Según
los datos, los países más felices del mundo son Suiza, Islandia, Dinamarca,
Noruega, Canadá, Finlandia, Holanda, Suecia, Nueva Zelanda y Australia, que
dominan el top 10.
Dentro del mismo ranking global,
nosotros estamos considerados en el lugar cincuentaiocho y en América Latina, somos
uno de los últimos
Ocupamos el puesto dieciséis entre los
veinte países de Latinoamérica. Adelante están Costa Rica, México y Brasil. Pero
si solo se considera América del Sur, nuestro lugar es el último.
De
acuerdo a los promotores del informe, la felicidad es posible en un ambiente de
bienestar social que no siempre está en relación al factor económico.
Así
se refuerza el principio que el dinero no hace la felicidad. Aunque no lo crea,
hay muchas personas y familias millonarias que no son felices.
Ser
feliz también incluye variables claves como el PBI per cápita y aspectos
valorativos como la justicia, la honestidad, la generosidad, la confianza y la esperanza
de vida sana
Partiendo
de estos indicadores hallamos la razón por la cual el Perú está ubicado, a
nivel mundial y continental, en posiciones nada gratas
Sobre
la base de los ítems mencionados, recién nos explicamos por qué los peruanos no
somos felices como quisiéramos.
¿El
promedio de las familias peruanas se desarrollan en un ambiente de bienestar social…?. ¿Tienen calidad de vida…?.
La respuesta salta de inmediato: no.
El
problema se siente mucho más en los hogares numerosos donde lo que ganan los
padres, aún si ambos trabajaran, no alcanza para satisfacer las necesidades
básicas.
Sobre
la justicia. Según el resultado de las encuestas de los últimos años, el poder
Judicial apenas supera el diez por ciento de aprobación ciudadana.
En
cuanto a la honestidad. ¿Somos honestos…? Basta recordar que el alto índice de
violencia y los actos de corrupción a todo nivel constituyen los principales
problemas del Perú actual.
El
otro punto es la confianza. ¿Confiamos en los congresistas y nuestras
autoridades…?. ¿Confía en sus amigos…?. La respuesta la tiene usted mismo.
Finalmente, la protección de salud. Nos pasamos la saliva
antes de seguir escribiendo. Los servicios de salud en el país no responden a
los requerimientos que la población necesita.
Luego
de este sencillo análisis, comprendemos por qué los peruanos de hoy, no somos
una sociedad feliz.
Al
respecto, el analista John Helliwell señala: "Países con capital
institucional y social fuerte apoyan un bienestar mejor y son más resistentes a
las crisis económicas y sociales…”
Ojalá
que algún día logremos superar las barreras existentes y alcancemos la
felicidad que es el justo anhelo de todos los pueblos…
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